El enemigo

El camino recorrido:
El desierto áspero, desvaído
Los fracasados en su rutina
como carroñeros de oficio
me tientan e inquietan
¿Vale la pena lo vivido?

¿Vale la pena dejarlo todo,
perderte entre vidas extrañas
olvidando tus sueños,
alejándote de lo que te llena
muriendo en silencio de ganas?

¿Valdrá la pena
pensar siempre en los otros,
poner la mirada lejos de tus deseos
buscar en la entrega apasionada,
pero despersonalizada
aquello que a otros llena?

Dejaste tu casa, tu familia,
y todo lo que a esta tierra te ata,
rompiste las amarras…
Ahora, en medio de la nada
En este desierto infame
sin familia, ni amigos,
ni lo que a esta tierra ata
No tienes nadie que te ame,
El desierto es luz que mata.

¿Vale la pena vivir
sin voltear tu mirada hacia ti?
¿Para qué fueron hechos tus ojos
no fueron para ti?

Y si te miras…
es que eres egoísta
Si piensas en ti …
es que de los otros te olvidas
Si haces algo por ti …
es que ya no das la vida
¿Cuándo podré
volver hacia mi la vista?

¿Por qué me pides lo que no tengo?
¿por qué de mi demandas
aquello que carezco?
¿por qué me quieres
de mi vida lejos?
No puedo darme
ya que no me pertenezco

Más si alguna vez soñara y dijese
“Yo me pertenezco”
En cuenta caigo
que mi existencia es todavía accessit
No puedo darme
porque de mi vida
ya estoy lejos
y aún queriendo
carezco lo que de mi demandas
no me pidas lo que ya no tengo…

Continúa…

(¿Crisis del meridiano de la vida?, probable... no me sale otra cosa... pero hay esperanza, por eso continúa con la respuesta a los vale la pena....)